En octubre del año pasado, el canal de Panamá anunció restricciones en los tránsitos a través de dicha vía navegable, a causa del inusualmente bajo nivel de agua en el lago Gatún que alimenta las esclusas del canal. En un año normal, más de 13.000 buques atraviesan el istmo panameño. Estos representan aproximadamente un 2,5% del comercio marítimo mundial. Según un informe de Clarksons, pese a que en los últimos meses las restricciones se han relajado respecto a los planes iniciales, los tránsitos siguen siendo un 30% menores de los habitual, con repercusiones variables según los sectores, informa Anave.
El 30 de octubre del año pasado, la Autoridad del Canal de Panamá anunció que a partir de dicha fecha y hasta el 1 de febrero de este año, reduciría el tránsito de buques diario de los habituales 36 o 38 tránsitos, a 18. Sin embargo, según Clarksons, en los últimos meses se han suavizado estas restricciones y el límite diario ha pasado a 24 tránsitos desde mediados de enero y a 27 desde mediados de marzo. La media de tránsitos diarios en el primer trimestre de 2024 ha sido de 23, una cifra todavía un 32% menor que la media del periodo entre enero y octubre de 2023, previo a la introducción de las restricciones.
Según Clarksons, estas restricciones han tenido un efecto desigual en los diferentes segmentos del mercado. Los buques portacontenedores, que son los mayores usuarios del Canal, normalmente representan un 50% de los tránsitos a través de las esclusas neopanamax y un 25% de los tránsitos totales. Tras la entrada en vigor de las restricciones han registrado un descenso de ‘solo’ un 9% en los tránsitos.
Para el analista, estos datos son reflejo de cómo funciona el sistema de reservas, que da prioridad a los portacontenedores sobre otros tipos de buques. Aun así, dichos buques han sufrido las consecuencias de las restricciones de calado. Algunos operadores de líneas regulares de portacontedores han redirigido sus tráficos hacia la costa Oeste de los EE.UU. Los datos reflejan un aumento de un 21% interanual en los dos primeros meses del año 2024 en el volumen de contenedores movidos por los cinco puertos más importantes de la costa Oeste, frente a solo un 4% en los equivalentes de la costa Este. También se han registrado algunos desvíos de los servicios con origen en la costa Este hacia el cabo de Buena Esperanza y cierto uso de los servicios ferroviarios entre los EE.UU. y Panamá. El descenso en los tránsitos medios diarios de los car carrierstambién ha sido limitado, registrando un 6% menos en el primer trimestre de 2024 frente al periodo de enero hasta octubre de 2023
Por el contrario, los graneleros, que suelen representar el 20% de todos los tránsitos de Panamá, han sufrido un descenso del 72%, debido a la falta de prioridad en el sistema de reservas y a la fuerte competencia en las subastas de las franjas horarias no reservadas. Las exportaciones estadounidenses de graneles sólidos con destino a Asia se han visto especialmente afectadas, con un porcentaje de tránsitos por Panamá inferior al 5% sobre el total frente a aproximadamente un 30% a principios de 2023.
En el sector de los metaneros, los tránsitos también se han reducido notablemente debido a la competencia en las subastas de las franjas horarias. Desde principios de febrero solo han atravesado el canal de Panamá tres buques de este tipo, cuando normalmente se producía un tránsito diario. Sin embargo, el impacto en este mercado ha sido limitado en general, siendo las tendencias estacionales las causantes de la debilidad actual.
Mientras tanto, los tránsitos de gaseros LPG de mayor porte se han reducido en un 23%, un impacto considerable pero menos grave de lo que algunos habían temido inicialmente. Los petroleros de productos (-20%) y los quimiqueros (-53%) también han sufrido un impacto notable.
Para Clarksons, las restricciones del canal de Panamá están teniendo repercusiones significativas, aunque dispares según los sectores. Unidas a las del mar Rojo, con un descenso de tránsitos de un 70% respecto a los niveles habituales, estas repercusiones se están amplificando a medida que las distancias se alargan. Un viaje desde el golfo de México a la costa norte de china, por ejemplo, es un 40% más largo si pasa por Suez que por Panamá, y un 50% si se hace por el cabo de Buena Esperanza. En Panamá, la pluviosidad y las tendencias meteorológicas influirán en cualquier nueva relajación de las restricciones. Para el transporte marítimo, el seguimiento de las perturbaciones en curso en lugares clave sigue siendo de gran importancia.