El sector pesquero recalca que la pérdida de aguas donde faenar siempre es una «mala noticia» y la Xunta de Galicia apela a la UE para que vele por los intereses de la flota, una vez que el Tribunal General de la Unión Europea ha anulado los acuerdos previos con Marruecos sobre las preferencias arancelarias concedidas por la UE a los productos de origen marroquí y también sobre el acuerdo de pesca. 

Doce barcos gallegos y unos  22 barcos de la modalidad de cerco, la mayoría con base en el puerto de Barbate, y unas 40 embarcaciones dedicadas a la pesca del palangre de fondo de los puertos de Barbate, Conil, Algeciras y Tarifa, son los primeros afectados de la sentencia judicial dictaminada por el tribunal europeo.

Según ha apuntado, el presidente de la Asociación Barbateña de Empresarios Pesqueros (Abempe), Tomás Pacheco, patrón del cerquero, Playa Yerbabuena, desde que hubo los problemas con el líder del Frente Polisario que fue asistido en España, ellos, como armadores, “cogieron un poco de recelo, y dejaron de asistir al caladero marroquí”. A ello se unión el cierre de fronteras con el tema de la Covid, lo que imposibilitaba hacer descargas en puertos alauitas, según las decisiones tomadas por las autoridades marroquíes.

Por ello, los pescadores piden que se tengan muy en cuenta los intereses pesqueros que tiene Andalucía en cualquiera de las decisiones que se vayan a adoptar por parte del Gobierno de España en el seno de la Unión Europea”.

“Creo que nuestros pescadores no pueden quedar abandonados a la única opción de futuro que tienen, que son esos caladeros, y, por tanto, le pido a las autoridades españolas que velen, puesto que nosotros no tenemos interlocución, por los intereses de nuestra flota pesquera en Marruecos”, han concluido desde la Junta de Andalucía.

Frente Polisario

El tribunal ha aceptado los recursos de anulación interpuestos por el Frente Polisario, aunque los efectos de la misma se mantendrán de momento congelados, “durante un cierto período de tiempo” debido a las “graves consecuencias” que una anulación podría tener sobre la acción exterior de la Unión Europea

El Frente Polisario pidió la anulación de las decisiones impugnadas mediante escritos de demanda presentados en 2019. Afirmando actuar “en nombre del pueblo saharaui”, alega entre otras cosas que el Consejo europeo aprobó los acuerdos “sin el consentimiento de dicho pueblo” y, por lo tanto, supone un incumplimiento de las obligaciones europeas en virtud del Derecho de la Unión y del Derecho Internacional.

El tribunal, con sede en Luxemburgo, anula por lo tanto los acuerdos relativos a la pesca y los aranceles con Marruecos, aunque deja un margen de dos meses para seguir aplicándolos, a no ser que el Tribunal de Justicia de la UE se pronuncie de forma definitiva en caso de que la UE presente un recurso de casación.

La sentencia llega en un momento un tanto tenso entre Marruecos y España tras la crisis fronteriza en Ceuta y también tras la polémica entrada en España de Brahim Ghali por la que la exministra de Exteriores, Arancha González Laya tendrá que declarar en calidad de investigada.

La Unión Europea y Marruecos han asegurado que tomarán “las medidas necesarias para asegurar el marco jurídico que garantice la estabilidad de las relaciones comerciales entre la UE y Marruecos”, según han señalado el Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, y el ministro de exteriores marroquí, Nasser Bourita.

A pesar de ello, la Confederación Española de Pesca (Cepesca) ha mostrado su cautela ante la sentencia y advierte de que en el peor de los escenarios, la decisión supondría un “duro golpe” para la flota pesquera comunitaria ya que el actual acuerdo de pesca de la UE y Marruecos contempla posibles licencias para un total de 128 buques de la UE, incluyendo 92 barcos españoles de Andalucía, Canarias y Galicia.