Tras las duras críticas lanzadas desde la Asociación de Navegantes de Recreo (ANAVRE) a la nueva orden del Gobierno español que regula los equipos de seguridad y la prevención de la contaminación en las embarcaciones de recreo, esta patronal ha encontrado vía de diálgo en ANEN, la Asociación Nacional de Empresas Náuticas. Además de la amplia relación de críticas al texto de la norma, ANAVRE ha criticado estos días que la Administración sólo ha atendido las opiniones de ANEN.

A pesar de esta situación, representantes de ambas asociaciones se reunían ayer intentar consensuar posturas. En este encuentro, se ha acordado solicitar a la Administración la ampliación del plazo de alegaciones al proyecto de reforma de las normas de seguridad en buques de recreo. 

Empresas náuticas y navegantes de recreo se han comprometido en mantener sus encuentros bilaterales y de ambos frente a la Administración con el fin de conseguir finalmente un texto normativo lo más consensuado posible.