NAVIERA ARMAS

 

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A partir de mañana, y durante un periodo de cuatro años, entra en vigor el Protocolo General de Actuación entre el Gobierno de España, el Gobierno de Canarias, a través de la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial, el Cabildo Insular de Tenerife, el Consejo Insular de la Energía de Gran Canaria, la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, el Ayuntamiento de Telde, el Ayuntamiento de Agüimes, el Ayuntamiento de Candelaria, el Ayuntamiento de Arafo, la Comunidad Energética Singular Sevi Goroeco, la Asociación de Propietarios y Empresarios del Polígono Industrial del Valle de Güímar (Polgüímar) y la Entidad de Conservación del Polígono Industrial de Arinaga (Ecoaga), para la descarbonización y transformación sostenible.

El objeto del Protocolo es establecer una alianza entre los sectores industriales de Canarias organizados a través de los polígonos industriales, con la participación de las administraciones públicas competentes, para abordar los objetivos de descarbonización, recirculación de residuos transformados en recursos y renaturalización de los espacios industriales, acudiendo a cuantas fuentes de financiación sean precisas, de acuerdo con el marco normativo existente, para lograr que las industrias de Canarias mejoren su competitividad, mejorando su acceso a los recursos básicos desde la perspectiva de la transición ecológica de las actividades económicas.

En concreto, las actuaciones se orientarán a abordar la eficiencia energética en las redes de distribución y en los edificios; la producción de energía fotovoltaica, eólica o de otras fuentes renovables en las instalaciones industriales y sus entornos; la separación y reutilización de los residuos, sólidos, líquidos y gaseosos, como recursos; la movilidad sostenible de las empresas y sus trabajadores/as para mejorar la movilidad entre las islas; el desarrollo de nuevas fuentes y líneas de investigación, desarrollo, innovación y competitividad para optimizar el potencial energético de las industrias y su potencial productivo; la renaturalización creando nuevas zonas verdes, que regulen la temperatura de los espacios, mejoren el paisaje del polígono y su impacto sobre la isla y generen sumideros de carbono para alcanzar la neutralidad climática del conjunto de las actividades.